Vistas de página en total

jueves, 9 de marzo de 2017

Marzo2017/Miscelánea. TURISMO DE INTERIOR (CONCEPTOS BÁSICOS) TERCERA PARTE.

*
GUÍA ELEMENTAL DEL TURISTA DEL INTERIOR PENINSULAR
(La torre cristiana de la Catedral de Teruel)
*
La primera cuestión que debe saber un “turista” que visite Teruel es la naturaleza y origen de la cerámica decorativa que adorna nuestras torres. Con carácter general hay que señalar que hay dos grandes tipos de alfarería, la alfarería de “agua” y la “decorativa”. La  alfarería de “agua”, en principio, no estaba vidriada, es decir, tratada al fuego con plomo, por el contrario; se le permitía al barro “sudar” para mantener el agua fresca. En los poblados prehistóricos de la Península Ibérica se encuentra gran cantidad de alfarería pues, tras la aparición del fuego el hombre se preocupó de cubrir una de sus primeras necesidades, tal es, la de tener agua siempre cerca.
Sin embargo la cerámica vidriada nace en el seno de las primeras civilizaciones y supone una especialización mayor. La primera vez que tenemos noticias de este tipo de cerámica es en la cultura Naqada o Nagada que abarca los tres periodos comprendidos entre los años 4.000 y 3.000 a.C (antes de Cristo). Un segundo periodo de esplendor tiene lugar en Babilonia en torno al siglo VI a. C. la tercera noticia sobre este tipo de producciones no llega de China en torno al siglo III a C.
Como pasa con los números que usamos habitualmente, que son de origen indostaní y fueron traídos por los árabes hasta occidente, así, sucedió con la cerámica.
La Península Ibérica es conquistada, velozmente, por los musulmanes entre los años 711 y 720  quedando unos reductos cristianos en el norte peninsular. Con la instauración del Califato de Córdoba, la península vería su mayor periodo de esplendor siendo, Córdoba, la ciudad más importante de Europa occidental (1.500 metros de calles iluminadas por la noche).
Los árabes (Ahora ya musulmanes), que practicaban el comercio desde la India hasta el Al-Ándalus, mediante caravanas, transferían los conocimientos y la técnicas. Famosas son en la España de la época las escuelas filosóficas de las diversas ramas de la ciencia. El centro más representativo en el Aragón actual era la taifa de Zaragoza.
*
UNA TORRE DEL TIEMPO DE LOS CRISTIANOS
En esencia, las dudas que siempre ha creado esta torre radican en dos puntos concretos. En primer lugar la datación. Como se tiene documentación en la que se señala su construcción siendo Juez de Teruel Juan de Montón en el año 1257, se pensó que era más antigua que la de San Pedro. Ambas se disputaban la mayor longevidad dado que las dos tienen elementos de transición del románico al gótico. Por estas dudas se hizo la prueba de termo- luminiscencia y resultó ser más antigua San Pedro.
Despejada la duda de la edad, otro tema que siempre ha llamado la atención, principalmente del profesor Torres Balbás, es el uso de unas piezas de cerámica, por primera vez en España y al parecer de procedencia bizantina. Llegan aquí y a Daroca lo que da a entender su penetración en la península Ibérica a través de Italia.
Por último, señalar, el remate octogonal barroco de la torre.
Así pues, se ha creído conveniente por parte de algunos estudiosos del arte incluir esta torre como obra mora o mudéjar en atención a su decoración. Pero si nos atenemos a la obra arquitectónica en sí, en absoluto es mudéjar.
Durante muchos siglos, viajeros que llegaban a Teruel calificaban de esta forma a las torres decoradas con cerámica vidriada: TORRES MORAS.  Es evidente que no tenían ningún criterio técnico y las llamaban así por aquel principio general que dice que: LO QUE SE DESCONOCE ES OBRA DE TIEMPOS DE LOS MOROS.
*
*
*
***
**
*