LAS FALLAS VALENCIANAS
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Además de otros títulos y
reconocimientos, Las Fallas valencianas son, desde este año, Patrimonio
Inmaterial de la Humanidad. Desde que las conocemos, hará unos cuarenta años,
han mantenido su esencia y han evolucionado, pero no demasiado en el aspecto
artístico. Al igual que el vestido de la mujer van, atuendo y fallas, cargados
de barroquismo pero, en algunos casos que veremos, están evolucionando hacia líneas
más modernas y menos recargadas.
Son muchas las interpretaciones que
se han planteado sobre el origen de las fallas. Recordar al respecto que en
Aragón también tenemos fallas y, en ambos casos, van unidas al concepto de luz
y fuego. Si fueron los carpinteros en la Edad media los que al limpiar
anualmente sacaban los restos de material del taller a la calle y le daban
fuego, como si tiene un origen más remoto, eso poco importa ahora. La fiesta/celebración
tiene una unidad/comunión con el pueblo valenciano indisoluble, al igual que las “mascletás”.
Las fotografías que aquí presentamos
de la falla ganadora este año 2017, la de Campanar, son el resultado aleatorio
de dar una vuelta completa al “monumento” teniendo además, en cuenta, que
íbamos arrastrados por una marea humana (literal). Algo que para un turolense acostumbrado a una
densidad de población de 8 o 9 habitantes por kilómetro cuadrado se nos hace/hacía
insufrible.
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