*
Estimo a quien de un revés
Echa por tierra a un tirano:
Lo estimo, si es un cubano;
Lo estimo, si aragonés
José Martí
Ha muerto Fidel Castro. Rectifico, ha
muerto el TIRANO Fidel Castro. Nosotros nos condolemos de la muerte de la
persona porque, siempre estaremos a favor de la vida, pero, nos alegramos de la
muerte del DICTADOR. De esa parte de su ser que tuvo oprimido a un pueblo y que
todavía sigue oprimido de la mano de su heredero y hermano Raúl. Hablo así, consciente de que soy aragonés y, consciente, de que pocos pueblos del mundo
tienen tanta autoridad como Aragón para hablar en nombre de la libertad: DE
PENSAMIENTO, DE IMPRENTA Y DE EXPRESIÓN. La opresión de un pueblo comienza
cuando se limita su libertad, su derecho a la libertad. Luego vendrá la
supresión de los demás derechos hasta, incluso, LA VIDA.
Cuando Víctor Pruneda (gallego de nacimiento) inicia la
publicación de su periódico El Centinela de Aragón señala bien claro, “soy consciente
de que escribo para el país clásico de la libertad”. Esa concepción se ha
perdido casi por completo porque, ahora, tristemente, somos un pueblo acomplejado. En Aragón nace el Hábeas
Corpus, en expresión nuestra: la protección del cuerpo del delito. Aragón es el
primer país del mundo en dotarse de una Carta de Manifestación y de una Cárcel
de Manifestados. Se trata de instrumentos que eviten toda violencia sobre el
preso. Ni la inquisición podía tocarlo. Recuérdese el episodio de Antonio Pérez
y la posterior ejecución del Justicia Mayor de Aragón por defender las
Libertades Aragonesas.
Pero hay otro caso todavía más
significativo que este, si cabe. Se trata de Miguel Servet. Este tozudo
aragonés es consciente de ser el primer hombre que muere por defender las tres
libertades: de PENSAMIENTO, de IMPRENTA y de EXPRESIÓN. Es también el precursor
de este punto en la lista de los DERECHOS HUMANOS UNIVERSALES.
Por todo ello, la opinión que tenga
un aragonés sobre este asunto, sobre el asunto de la LIBERTAD, deberá
forzosamente tenerse en cuenta.
Si aplicamos como aragoneses, conscientes
del bagaje histórico en materia de libertades que aportamos a la cultura Universal,
nuestra lógica y nuestras convicciones más enraizadas, llegaremos rápidamente a
la conclusión que la dictadura de Fidel Castro, que la dictadura comunista que
él encarnaba, merece la más recia de nuestras condenas y la condenamos.
Hay muchas personas que tratan de
justificar esta palmaria falta de libertades con argumentos como: con Fidel hubo escuela, o hubo alimento, o hubo sanidad, o cualquier otra cosa… Diremos
que esa ecuación es falsa en su totalidad y reprobable en todos los sentidos.
Pues, solo la LIBERTAD es compatible con la satisfacción de todas las
necesidades humanas. Políticas de palo y zanahoria no son ya de recibo. Como te
quiero, te mato. Si quieres comer, tiene que pensar como yo. En fin, hay quien
trata de justificar lo injustificable, sin saber que queda en el más absoluto
de los ridículos.
Sólo en LIBERTAD se lleva a cabo la
tarea más importante del ser humano en esta tierra: la tarea de labrar su
propia DIGNIDAD como individuo y como PUEBLO. Por ello, cuando un dictador muere en la cama,
un PUEBLO fracasa. Y en esta circunstancia aceptamos la parte alícuota de
responsabilidad que hayamos tenido en tiempos pasados en España. Pero, desde
luego, muchísima menos responsabilidad que otros.
¡PÉSAME POR EL HOMBRE! Pero alegría
contenida por la muerte del OPRESOR, más todavía, sabiendo que la dictadura
está viva en Cuba.
***
**
*