CASA DEL PRIOR
En el mismo siglo, segunda mitad
del siglo XVI, debió de construirse, también, la casa del santuario que como
pude verse por las fotografías es una construcción sólida y excesiva para
nuestros tiempos actuales. Pronto se dotó al santuario de servicio religioso
propio y al efecto se le nombró prior. Dotada de fuentes de aguas medicinales,
la afluencia de público en estas épocas de tan poco desarrollo de la medicina y
de la higiene, debió ser fluida. Actualmente tiene tres manantiales, uno minúsculo
dentro de la iglesia (LA FUENSANTA) y dos exteriores que dan alivio al viajero
y excusa para subir a merendar en las zonas recreativas. Las campanas están
situadas en unos ventanicos que quieren ser el arranque de una formidable torre,
pero que no llegó a construirse. Hay libros e inventarios artísticos que le
otorgan torre al santuario, nosotros no la hemos visto por ningún lado, a no
ser esta estructura sobre la capilla de la Virgen. Admira una construcción tan
potente en un lugar tan angosto, pero ya se sabe el dicho: La fe mueve
montañas.
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