PIEDRA SECA
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Piedra a secas o piedra seca. Se
trata de una actividad constructiva propia de estos territorios donde abunda en
demasía. Fue declarada Bien de Interés Cultural el 22 de enero de 2002 y punto.
Si alguien busca meterse en el tema está en el sitio adecuado. Hay senderos señalizados
y rutas establecidas para conocer este
fenómeno bastante peculiar. En casi todas los pueblos de Aragón son comunes las
cerradas, que no son otra cosa que huertos protegidos por tapias de piedra. En
La Iglesuela del Cid, no sólo son los huertos, sino que todo el campo esta
tapiado. La piedra es muy abundante y se utiliza con profusión. Se aprovecha para
hacer chozas, cabañas, cuevas, casetos... Con la piedra de amojonan los campos y
se hace el empedrado de los caminos. Es una piedra suelta que no está unida con
argamasa. Para las construcciones más sólidas sí que se utiliza pegamento. Los
peirones son aquí, de piedra sillar, unidos con argamasa. Sin embargo los
puentes son también de piedra seca logrando una técnica arquitectónica genuina. La explotación industrial de la
piedra seca ha sido una actividad con mucho desarrollo en los últimos tiempos.
Hacemos un recorrido por los lugares próximos al pueblo, donde tropezarnos con
estas construcciones es algo habitual.
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