LUCHA CONTRA EL ESTADO ESPAÑOL
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En España es deporte nacional la lucha
contra el Estado. Esta ”lucha” o ataque constante a las instituciones del
Estado, se manifiesta en los siguientes puntos.
LA BANDERA
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EL HIMNO
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EL JEFE DEL ESTADO
(EL Rey)
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LA CONSTITUCIÓN
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LAS FUERZAS ARMADAS
Y
EL CUESTIONAMIENTO PERMANENTE DEL HECHO
DEMOCRÁTICO ESPAÑOL.
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Lo doloroso del caso es que, la mayor
parte de las personas que opinan, no han tenido la deferencia de informarse previamente
sobre la materia en cuestión y siguen la pauta, ”la consigna”, de aquellos
partidos que hacen de la debilidad del Estado su forma de ser y existir.
¡Lamentable!
Si bien es cierto que el estado
español lleva o ha llevado una trayectoria decadente desde Fernando VII (siglo
XIX), también es verdad que, en la actualidad y desde el punto de vista
económico, democrático, social y cultural, el cambio ha sido radica. España es un país democrático
y homologable a cualquiera del mundo que pueda entenderse como, país moderno y
compatible con los criterios de respeto por los derechos y las libertades,
tanto individuales como colectivas.
Pero vayamos por partes.
LA BANDERA.- La mayor parte de las
personas que opinan sobre ella, no saben el origen de dicha bandera, ni se han
preocupado por conocerlo. Simplemente siguen la consigna del partido o del
sindicato. Pondré un ejemplo. Un concejal de Teruel iba a las manifestaciones
con el pin del Ayuntamiento en la solapa y la bandera republicana al hombro. No
se había enterado de que el escudo de Teruel tiene no una, sino dos banderas
españolas. La bandera bicolor (roja y amarilla) tiene su origen remoto en el reinado de Carlos
III, que la instaura en la Armada española. Desde la Edad media los colores
rojo y amarillos eran distintivos de la flota de los Reyes de Aragón. Por tanto,
los catalanes, no deberían rechazarla para no ir en contra de sus propios
sentimientos.
Por otra parte, la bandera, ni es ni
deja de ser democrática. A la bandera, como símbolo de una nación, la hace
democrática el pueblo mediante su organización democrática y la creación de
leyes justas (entre estas leyes, la primera es la Constitución)
Quemar la bandera de España, como
muchas veces lo hemos visto, es un hecho que debería tener mayor castigo.
EL HIMNO
Marcha Real es la denominación
tradicional, conjuntamente con la de Marcha Granadera o antiguamente, Marcha
de Granaderos, que recibe el himno nacional de España. Aunque el rey Carlos III
la declaró Marcha de Honor el 3 de septiembre de 1770, fue la costumbre popular
lo que la convirtió de facto en himno nacional, con anterioridad a que lo fuese
declarado legalmente.
Pero si aceptamos (no todos, ya que
algunos proponen el himno de Riego) la música del himno nacional, por el
contrario, no aceptamos ninguna letra, hecho que se ha convertido en una
excepción a nivel planetario entre las grandes potencias.
Pude gustar más o menos una letra u
otra. A tal fin hemos publicado en Miscelánea todas las letras de todos los
himnos de las Comunidades Autónomas y todas las propuestas de himno nacional
español. Resulta curioso que ante algunas letras autonómicas como la catalana,
que incita a la violencia (¡BUEN GOLPE CON LA HOZ¡) nadie haya dicho nada y se
admita con total tranquilidad.
También es verdad que falta sentido
estético entre el público en general y particularmente en el aragonés. Los
aragoneses poseemos, si no el mejor uno de los mejores himnos autonómicos, también, uno de
los más bellos y más poéticos. La música es de Antón García Abril y la letra de
cuatro excelentes poetas aragoneses. Bueno… pues tampoco gusta…
EL JEFE DEL ESTADO
Es una figura constitucional y además
tiene el rango histórico de rey. Muy a menudo vemos hacerle desplantes cuando
no, quemar su retrato junto a la bandera española. Democráticamente se ha
entendido que a los que realizan estos actos vandálicos además de pitar el
himno nacional, no hay que castigarlos porque, sería una provocación. Es decir,
el mundo al revés.
Estos temas, son palpables día a día
y los vemos ya en el telediario demasiado a menudo. Se sigue la estrategia de
desgastar, de resquebrajar, la estructura del Estado.
LA CONSTITUCIÓN
Recuperando la “costumbre” de todo el
siglo XIX y parte del XX. Cualquier constitución que se hiciera, simplemente: NO
GUSTABA pero, cuando se redactaba la de la otra parte sucedía lo mismo: TAMPOCO
GUSTABA.
La actual Constitución española de
1978 fue fruto de un extraordinario consenso y en la Comunidad que más de votó
a su favor fue Cataluña.
Para reformarla es necesario
CONSENSO pero, qué consenso va a haber si no lo hay ni siquiera para el himno,
para una simple letra. Ahora que, si entramos en el tema del "derecho a decidir" llegamos a un callejón sin salida.
LAS FUERZAS ARMADAS
La hemos convertido en una ONG pero,
ni aún así es aceptada. Vemos a menudo que le prohíben hacer publicidad en determinados
sitios e incluso entrar en los colegios. Poner un “banderín de enganche” en
determinadas Comunidades autónomas es un agravio total y un conflicto con el
Estado. ¡Tremendo! Uno de los ministros peor valorados, siempre, es el del ejército.
ESPAÑA UN ESTADO DEMOCRÁTICO
Es otro de los deportes nacionales
más practicado. Llevar a España ante tribunales internacionales por no respetar
los derechos civiles, ni humanos, es el pan nuestro de cada día.
Pero lo que más gusta decir a determinados
partidos es que en España (atentos a la frasecita pedante): SUBYACE UN SUSTRATO
FASCISTA, HERENCIA DEL FRANQUISMO”. O sea, que el estigma esta inherentemente incrustado en el Estado y solamente se podrá
superar mediante una revolución que borre todo el pasado. Y eso es así, porque
determinados partidos, todavía sueñan con las revoluciones románticas. Ya lo
enunció Goethe: SOBRE LAS CENIZAS DEL ANTIGUO RÉGIMEN (Monarquía absoluta)
CONSTRUIREMOS LA NUEVA SOCIEDAD. Y es que, los comunistas, todavía no han
cambiado de chip.
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ES YA UN CLAMOR
ES YA UN CLAMOR
El
independentismo catalán y las fuerzas de la izquierda española que le apoyan en
algún momento han iniciado un proceso de deconstrucción del Estado español que
pretende socavar todas y cada una de sus instituciones. Un Estado débil siempre
es un enemigo menor para sus intereses. Para unos el objetivo se halla en la
cimentación de un nuevo Estado más pequeño en Cataluña y el resto persigue
llanamente perforar su estructura para así apoderarse teóricamente de su poder
político y ejercerlo según sus convicciones, aunque el alcance se limite a la
dimensión propagandística. (Xavier Salvador en https://cronicaglobal.elespanol.com/pensamiento/zona-franca/dejen-rey-paz_123575_102.html)
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