LA MINERÍA EN LA PROVINCIA DE TERUEL
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La minería en Teruel toma
protagonismo con tres minas: Azufre en Libros, Hierro en Ojos Negros y Carbón
en Utrillas. Y citamos estas tres, únicamente, porque son las que más mano de
obra emplearon en sus tiempo con mucha diferencia y, por tanto, de mayor
impacto social.
La UE tiene un antecedente llamado
CECA (Comunidad Europea del Carbón y del Acero) creada en el Tratado de París
de 1951. Sin embargo, en la provincia de Teruel 50 años antes, Domingo Gascón
(natural de Albarracín), a la sazón diputado por el distrito oscense de Boltaña
comprende la situación económica de la provincia de Teruel.
En vistas a que estas riquezas
naturales no eran explotadas por los propios turolense, crea una oficina en su
casa de Madrid para “vender” los cotos mineros de la provincia. Efectivamente,
en el año 1906 la Industrial Química de Zaragoza empezó la explotación de las
minas de azufre de Libros. También, a
comienzos del siglo XX, don Ramón de la Sota inicia la explotación de los
hierros de Ojos Negros y a renglón seguido otra sociedad zaragozana comienza la
explotación del carbón de Utrillas y la creación de un ferrocarril hasta
Zaragoza MFU (el carbón se explota para uso doméstico).
Con el final del siglo XX tiene lugar
el fin del sueño de la minería turolense. La primera mina en cerrar es la de
Azufre, en Libros, tras la Segunda Guerra Mundial. Pero, a partir del año 1945,
al carbón le iba a tocar desempeñar un papel fundamental en la producción de
energía eléctrica. Las minas de Utrillas son compradas por los catalanes y a lo
largo de la segunda mitad del siglo XX se crean tres centrales térmicas a
saber: Aliaga, Escucha y Andorra. Actualmente las tres cerradas. Por otra parte
la CMSM que se había nacionalizado tras la Guerra Civil (36-39) se privatiza en
los años setenta y muy pronto se cierra.
Quedan en la provincia abundantes
reservas minerales, pero la época de las grandes explotaciones pasó.
En la actualidad, en gran parte de la provincia, se han instalado generadores eléctricos: aerogeneradores y solar fotovoltaica. Tal es la demanda de permisos que Aliaga (DGA) no da abasto. Teruel sigue siendo exportadora neta de energía.