(1928 - 2004)
*
*
Llegó
a Blancas (comarca del Jiloca) ya enferma y bajó al médico a Teruel. En la
segunda visita nos dejó una separata de “La Gran Enciclopedia Vasca” en la que
aparecía ella y su pintura (claro) de forma monográfica. No hemos vuelto a
saber más de ella pero, ayer tarde, llamé a un número de teléfono de Blancas
que tiene el apellido Corella. Nos atendió un señor y nos dio ligeras
explicaciones. Sus antepasados eran de Blanca, pero ella había nacido ya, fuera
del pueblo. Su marido vive en Monreal del Campo, lo mismo que su hijo. Nos dijo que hacía
unos nueve (9) años que había muerto y
nos dio los nombres de sus familiares.
Hemos
vuelto repasar el cuadernillo cuyas fotografías de los cuadros en él publicadas
aparecen en este spot de Miscelánea y hemos vuelto a leer el texto de Mario
Ángel Marrodan. La crítica que de sus cuadros se hace es sumamente elogiosa y
la consideración que de su obra se tiene en el País Vasco es admirable. De la
misma forma, me gustaría que los turolenses la considerásemos como nuestra,
como una pintora de aquí y una pintora universal. No por un apasionado sentido
localista que tan engañoso es, sino por
la calidad de la persona y de la obra con la que contribuye a aportar calidad a
la cultura contemporánea española. Señalaré el arranque del texto que acompaña
al cuadernillo y que pondrá, sin duda, al lector en antecedentes de las
cualidades y calidades artísticas de esta mujer:
“El
arte de Nieves Corella se ofrece a la gente como un buen repertorio, verísimo y
laudable, de enduendamiento plástico. Mitigada la impresión colorista, el excelente
tono, con su gran técnica, pulcra en el rigor, animada y preocupada por el
modelo gráfico, la sustituye por un eros espiritual de gozosa corriente
creadora.
Pero
vayamos adentrándonos despacio por la nueva presencia de esta pintora, cuya
pincelada acompaña más que adorna, mientras el deleite de su alma toma posesión
de un arte verdadero en sentimental tensión de cuadro y artista. Así es, esta
es, un alma que pinta, que pide más explicaciones a la forma que al color, que
pone a vivir personajes en vivencias a la hora de la recolección y ante los
hermosos misterios del despertar colgado en la pared, que lo dicen todo con el rostro.
Entrega reflexiva la de Nieves a su labor creativa. Coincide la vehemencia en el quehacer con el clima estético del que es capaz un oficio personalísimo, que proyecta sus composiciones hondas y delicadas a la disciplina expresiva."
(…)
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
*
Ermita de la Virgen de la Carrasca en Blancas
*
