LA MURALLA Y LOS CARLISTAS
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Hubo un tiempo en que el hombre era
capaz de determinar los acontecimientos futuros y, por ello, podía prevenirlos.
Es el caso del siglo XIX y las Guerras Carlistas. Todo esto lo decimos, a tenor
de la restauración del lienzo de la muralla entre la llamada, "Torre del Agua" y
la otra, más esbelta, conocida como "Torre Lombardera". Sabían los liberales,
intramuros de la ciudad, como iba a ser el ataque carlista. El ataque sería
entrada la noche y en día de luna llena
con la luz del satélite a sus espaldas. La posición central del ataque se situaba
en la zona de La Nevera, precisamente, la que ahora se está restaurando. Luego,
actuarían como en una pinza. Una sección atacaría por los Corrales de Roquillo
y otro grupo por la Puerta de Zaragoza.
Cuando se restaura, ahora, la muralla
se trata de dejar claro estos episodios históricos. Y efectivamente se está
haciendo bien. Las piedras hablan y las piedras de la muralla de Teruel,
también lo hacen.
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