Vistas de página en total

miércoles, 10 de diciembre de 2014

Diciembre2014/Miscelánea.LOS ESCAPARATES DE LA SUCURSAR (AHORA, CAJA RURAL DE TERUEL)

ESCAPARATES DE LA RURAL
*
Arturo García Enguita describe su obra con el sugerente título de “Bosque invernal”. La fundamentación teórica la realiza sobre Goethe y evidentemente sobre el romanticismo. A tenor de estos principios revolucionarios, la nueva sociedad debe nacer ex-novo sobre los restos de todo lo anterior. Como el Ave Fénix, el mundo vuelve a resurgir de sus cenizas. De la misma manera y desde la misma naturaleza: el chopo seco, las ramas descarnadas, la luz emergente y cegadora, la nieve que congela el paisaje y lo deja yerto, son la base de partida para un nuevo año. Nuevo y renovado en todos sus términos. Por eso el romanticismo tuvo éxito, porque gusta de las ruinas y el herrumbre, quema el pasado y crea nueva vida. Es una ideológica muy afín al adolescente dispuesto a hacer tabla rasa de un pasado próximo que le atormenta. El hombre maduro, que se acostumbra a asumir sus errores y construye sobre ellos su compleja psicología, deja el romanticismo de lado y se hace conservador. El romanticismo, como la revolución, dura poco tiempo. Justo lo que le cuesta al hombre el aburguesarse y acomodarse a los nuevos tiempos. Esto lo sabía bien Juan Romero Alpuente (Valdecuenca). Pero... eso ya es otra historia. Bien traído el tema, este año, en el que algunos jóvenes se dejan seducir por imaginarias revoluciones que no son capaces de asumir ni soportar.
*
El potasio y el nitrógeno serán minerales imprescindibles en la primavera.
*
Y de fósforo tendrán, también, cubiertos los pies.
*
*