En la margen izquierda del río
Guadalaviar tenemos un poblado Íbero/Ibero conocido como Alto Chacón. Siguiendo
la línea de la margen derecha de estas “muelas” que bordean el río y tras pasar
lo farallones de “El Rajo” nos encontramos con el santuario Celta de Peñalba de
Villastar, muy próximo ya a Villel. El santuario fue encontrado a principios
del siglo XX por Juan Cabré y expoliado por los catalanes. Nos preguntamos, cómo
fue la forma de poblamiento de estos territorios en los que se alternan dos
culturas diferentes: Íberos/Iberos y Celtas. Seguramente estamos hablando de un
territorio de frontera. Cosa que no sorprende, porque el carácter fronterizo ha
estado siempre presente en la historia de Teruel. Este impresionante santuario
lo comprenden casi tres kilómetros de roca en forma de panel (como una gran
pizarra escolar) en las que los primitivos habitantes de este lugar nos han
dejado interesantes mensajes a la posteridad.
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