“MÁS PERDIDO QUE ZORRA EN UN PANIZO”
*
Son las catedrales del siglo XXI. Los tiempos
y los hábitos han cambiado, hay que ir
al centro comercial aunque no compres, lo mismo que antes ibas a misa aunque,
tampoco, comulgases. ¿“Puerto Venecia”?... tienes
que verlo –te dicen- porque es el centro
de su género más grande de Europa, o por
lo menos de los más grandes. Si tenemos en Aragón algo en lo que destaquemos a nivel
europeo, hay que verlo, ¡por supuesto!
Hasta allí nos encaminamos y llegamos con la simplicidad y facilidad con la que
a un panal de rica miel llegan cien mil moscas. Unas cien mil moscas sueles ser
algo menos que el 10% de todos los aragoneses. Así que hay que relevarse continuamente
para que el centro no sea otro fracaso. Si creas un monstruo el problema es
luego, lo que te come el animalico. Gracias a los teléfonos móviles no te
pierdes, aunque, de todas formas, lo más práctico es sentarse al costado del
lago a tomar un Cariñena mientras que ellas pasan revista a “todas” (¡a “todas”,
oiga!) las miles de tiendas que aquí debe haber, sin contar IKEA (el cementerio
de los carpinteros). Cuando abandonas ¡por fin! el maldito laberinto, sientes la
satisfacción de haber superado otra prueba en el programa-concurso de la vida.
*
*
*
*
*
*
*
*
*
