GIBRALTAR ESPAÑOL
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Posiblemente la reivindicación
sea recibida con indiferencia en un país, en una Nación y Estado a la vez
(España), cuya autoridad y cuyo territorio se intenta reducir en una labor
permanente de zapa por parte de partidos segregacionistas que, sin embargo, sí
que se apuntan al pesebre del Estado del que abominan. Entenderíamos por
ejemplo que ERC o la CHA no se presentaran a unas elecciones para formar parte
de la representación de un Estado que detestan (el español). Entenderíamos que al no querer
formar parte de este Estado no se pegaran a las ubres del mismo como lapas. Si
acaso fueran, bien nacidos, en agradecimiento al botín que obtienen, ética y moralmente
ilícito, les obligaría a solidarizarse con un Estado que reclama lo que es
suyo. A un Estado, el español, que reclama el fin de un anacronismo histórico:
una colonia dentro de Europa en manos de un país aliado en la defensa común
(OTAN). La historia de Gibraltar mientras ha permanecido en manos del imperio Británico, ha sido un
rosario constante de agresiones a España. Primero ocupando territorios que están
fuera del tratado: Territorio terrestre que se cedió para combatir una
epidemia. Territorio aéreo que se ocupa rara que pueda haber aeropuerto y,
territorio marítimo, que se ocupa impunemente por ser (el Gobierno local del Peñón)
“los primos de Zumosol”. El Gobierno Británico, como forma de consolidar la
colonia y obtener apoyo popular la ha convertido en un paraíso fiscal y un foco
de contrabando. A esta cueva de ladrones es a la que dan apoyo implícito a
veces y otras explicito, nuestras fuerzas políticas de izquierdas.
Sin embargo, el Peñón de Gibraltar
ha jugado un papel muy relevante en la reciente historia de Europa, razón por
la cual, su apetencia es todavía muy apreciada por el Reino Unido, como base de
control del Estrecho de su nombre. Inglaterra apoyó a Franco en la Guerra Civil
para mantener expedito el paso de sus barcos a la India (la Segunda Guerra
Mundial estaba ya lanzada). Terminada la contienda mundial, Inglaterra quiso
devolver la democracia a España aislando económicamente al régimen (primer
cerco económico a un país) y haciendo fracasar la invasión comunista armada por
el valle de Arán (Santiago Carrillo). Franco respondió con una batería de búnkeres
que todavía existe en la Línea de la Concepción. Resultado de estos
desencuentros es la situación actual en la que se observa nítidamente el hecho
de que, el ser España una democracia, importa muy poco al Reino Unido. Lo que
permite mantener la colonia al Reino Unido es la relación de fuerzas, hoy,
decantadas mayoritariamente hacia el colonizador. No sucedió lo mismo con la
colonia China de Hong Kong, allí, debido a la aparición de la nueva potencia China y a los
intereses económicos se cedió la soberanía.
En Aragón entendemos lo de
Gibraltar pues seguimos teniendo y temiendo, por parte de algunos partidos catalanes (ERC), apetencias
territoriales sobre nuestra tierra. Toda la izquierda aragonesa, al unísono,
participa en el espectáculo de entregar una porción sustancial de nuestra
cultura al imperialismo catalán (actitud idéntica a Gibraltar). Lo hacen, sin rubor, pensando que así son más
progres. Resulta sorprendente que en una Europa Unida tengamos todavía que
decir: ¡El Matarraña es Aragón! o ¡Gibraltar es español! El enemigo está en
casa.
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EL BLOQUEO ECONÓMICO A ESPAÑA OCASIONÓ LA PERDIDA DE SOBERANÍA SOBRE CUATRO BASES MILITARES A FAVOR DE EEUU.
El miércoles, 4 de julio de 1951, tal como se comenta en "LUCHA", España es excluida por "nuestros amigos" europeos del "Plan Marshal" propiciado por los EEUU para reconstruir Europa. Desde el año 1945, España, ya sufría un aislamiento económico feroz (de Inglaterra y Francia, principalmente) y la hambruna en las ciudades era brutal (periodo de autarquía). En 1951, Franco cede parte de la soberanía española a EEUU a cambio de ayuda económica y entrar en la ONU. En concreto fueron cuatro bases: MORÓN, ROTA, TORREJÓN Y ZARAGOZA las que pasaron a soberanía americana. Franco se garantizaba su supervivencia en la Jefatura del Estado Español. Cuatro bases americanas y una inglesa han minado el orgullo español, el orgullo de haber sido el primer imperio mundial: a España le cupo, en su tiempo, el honor de dar la primera vuelta al mundo (expedición de Magallanes-Elcano).
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A pesar de los avatares de la historia, el "Torico" resiste en su columna desde mediados del siglo XIX.
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