SAN ANTÓN Y SU GORRINO
(IGP)
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El turolense de a pie sabe que el
cerdo es un animal muy importante para la provincia de Teruel. Buena parte de
nuestra economía y de la forma de fijar la población al territorio está en la
industria del cerdo. En el cerdo de Teruel hay dos líneas básicas. Una es la de
los cerdos criados para producir jamones con Denominación de Origen. La otra línea, es la que produce cerdos para el consumo y la exportación. Esta segunda línea
está de enhorabuena debido a la “peste porcina” en China, lo que ha hecho que las
exportaciones se disparen.
¿Cuál es la problemática de los cerdos
criados para la Denominación de Origen Jamón de Teruel? Pues que este cerdo,
quitados los jamones y las paletillas, el resto de la carne se equipara a la de
los cerdos que no son criados con estas características y, por lo tanto, vendida
como carne de cerdo normal y corriente. A tal efecto, y para dar solución a este
problema que resta valor a una carne de mayor calidad que la de las crías
normales, se ha constituido una asociación de productores de cerdos con el fin
de conseguir la marca de Indicación
Geográfica Protegida para este animal específico (IGP). Los beneficios que esta IGP traerá se producirán
al vender todo el cerdo en su
conjunto por un precio y una calidad superior a la normal.
Durante el año 2018 se produjeron en
Teruel 190.000 cerdos de estas características y el Consejero del Gobierno de
Aragón señaló que, para la Feria del Jamón del año 2020, Teruel tendría reconocida ya la
IGP para los cerdos que producen jamón de Denominación de Origen. Que así sea...
¡Viva San Antón!
¡Viva!
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