EL IMPUESTO DE CONSUMOS EN TERUEL
Además de la serie casi infinita de impuestos que ha habido en
todas las épocas el asunto que nos trae hoy es el impuesto de “consumos”. Este
impuesto lo podían cobrar las poblaciones que tenían el título de ciudad. En la
provincia de Teruel tres localidades son ciudades: TERUEL, ALCAÑIZ Y
ALBARRACÍN.
En las entradas a la ciudad el
Ayuntamiento colocaba una garita y un señor al que llamábamos “el consumero”.
Cuando veníamos de Tortajada a Teruel debíamos pagar por todos los productos
que entrabamos en la ciudad: gallinas, conejos, huevos, frutas verduras, etc.,
etc. La garita estaba junto a la casa “del Cagarruto”.
Para no pagar este impuesto lo que
hacíamos era dar un rodeo metiéndonos por el cementerio. Entrábamos por la
puerta que aparece en la fotografía y salíamos por la del sur bajando luego por
las escaleras hasta la calle del Carrel.
*
LOS IMPUESTOS DESDE LA EDAD MEDIA
Javier Ortega González hace un repaso
de los impuestos que desde tiempos inmemoriales se han pagado a la Iglesia, al
rey o a los señores.
*
El diezmo y las primicias en la
Biblia
“Abel ofreció a Yahveh en el ara sus
mejores ganados, origen de las primicias y del diezmo, fundamentado en el
principio de que, siendo Dios el dador de todo bien, a Él se debe la primicia
de ese mismo bien que de Él recibe el hombre”.
¿Qué cosas se debían diezmar?
“De todo el producto del grano que
rindiere tu campo cada año” (Deuteronomio 14:22). “De tu vino o de tu aceite”
(Deuteronomio 14:23). “De la simiente de la tierra como del fruto de los
árboles” (Levítico 27:30). “De vacas... de ovejas, de todo lo que pasa bajo la
vara”, es decir, que fueran contados al salir a los pastos (Levítico 27:32)
*
Algunos de los servicios reales y
señoriales ya figuraban en la Baja y Alta Edad Media.
Veamos algunos:
En Aragón en particular el impuesto
más conocido y que dio lugar a la creación de la Diputación del Reino es el llamado
Impuesto del General y que afectaba a “todas” las mercancías que entraban o salían
del reino de Aragón. De igual manera se hacía en Valencia y Cataluña y por eso
tanto la Diputación de Aragón como la Generalitat catalana y valenciana nacen
del mismo acto de las cortes de Monzón en tiempos de Pedro IV el ceremonioso.
*
Fonsadera:
servicio personal que antiguamente se hacía para la guerra y que consistía en
abrir fosos, de donde le venía el nombre, en derredor de castillos y
fortalezas. Hoy se conocerían como trincheras.
Martiniega:
era un tributo que se pagaba el día de San Martín.
Marzadga:
tributación que se hacía efectiva en el mes de marzo.
Yantar:
tributo que los villanos -habitantes de las villas- pagaban al Rey o al Señor
cuando pasaban por sus tierras y que consistía en comida. Posteriormente se
pagaba en dinero.
Almojarifazgo:
tributo que se pagaba por las mercaderías que salían del Reino o por las que
entraban en él o por las que iban en tránsito de un Reino a otro de España.
Infurción: era
el tributo que se pagaba al señorío por el solar de la casa donde vivía el
campesino, ya que este había edificado su vivienda sobre terreno propiedad del
Señor.
Pecho: el que
se satisfacía al Rey o al Señor por razón de los bienes o haciendas, llamándose
pechero al que pagaba el pecho.
Alcabala:
impuesto que incidía sobre la venta o intercambio de bienes muebles y
semovientes.
Cientos:
tributo que llegó a alcanzar hasta el 4% de las cosas que se vendían y pagaban
alcabala.
Servicio:
impuesto derivado de otro más antiguo que se llamó servicio de los pedidos, así
llamado porque era el que el Rey pedía cuando se encontraba en dificultades
financieras de Estado.
Millones:
impuesto que se instauró en el reinado de Felipe II sobre la alimentación y
consumo de: vino, vinagre, aceite, carne, jabón y velas de sebo. Se renovaba de
seis en seis años.
Alfarda: era
el pago por el aprovechamiento del agua (acequias, canalizaciones…).
Axadero:
tributo que debía pagar cada persona que trabajaba con una axada (azada).
Banidades:
pago al Señor por el uso del horno de pan, molino…
Chapín de la reina: impuesto para pagar los gastos de las bodas reales.
Cuatropea:
impuestos sobre la venta de ganados.
Herbaje: pago
sobre el ganado trashumante por atravesar tierras y bosques, por el
aprovechamiento de los pastos.
Monedaje:
tributo al Rey por la fabricación de monedas.
Pontazgo:
tributo que se paga por usar los puentes.
Abadía o luctuosa: derecho que tenían los curas a percibir, a la muerte de sus feligreses,
cierto tributo de los bienes que deja.
Oblata:
impuesto eclesiástico que cada familia abona al sacerdote a cambio que este
mantuviese las fiestas patronales.
Bovaje:
aportación extraordinaria que se pagaba en relación con las cabezas de ganado
bovino y recaía sobre toda la población, incluidos nobles y eclesiásticos.
Sagrera:
nombre que en Cataluña recibía el espacio que rodeaba las iglesias, por tener
la consideración de terreno sagrado, protegido de la violencia feudal.
Botilla:
impuesto medieval que grava la compraventa de bienes inmuebles. Más tarde se
llamó alcabala.
Talla o taja o tala: tributo que se pagaba por la tala de los árboles.
Salís: impuesto
por la compraventa de la sal.
Assatura o asadura: obligación que tenía el pastor de matar una oveja y comerla la gente
del pueblo por donde pasaban las ovejas, durante la trashumancia.
Carceragio:
tributo a pagar para poder salir de la cárcel.
Tolta: antiguamente,
exacción arbitraria. Exigencia de servicios al vasallo que, contra el derecho,
exigía el señor feudal.
Mortura:
tributo a pagar el día de la muerte de un Señor.
***
**
*