Tras la toma (8/01/38) y saqueo (constante) de la ciudad de Teruel por la II República Española, solamente quedaba una opción: evacuar a las personas y a los bienes patrimoniales que por su naturaleza no pudieron ser saqueados por los soldados, por ejemplo, un altar de iglesia o la custodia mayor de la catedral, etc. Los vienes evacuados, primero a Valencia y luego a Barcelona no tuvieron todos un mismo fin. Unos llegaron a Suiza, otros viajaron por los sitios más inverosímiles y otros se perdieron irremisiblemente. Hace muy poco tiempo en la iglesia de San Pedro se procedió a restituir la imagen de San Sebastián. Fue en mayo del año 2022 y el motivo del acto público fue dar a conocer a los turolenses el hallazgo y recuperación de una talla de San Sebastián perteneciente al retablo renacentista de la iglesia de San Pedro de Teruel capital. También se procedió a organizar las tallas existentes en función de su posición original. El trabajo de seguir la pista a los diferentes bienes que "desaparecieron" (viril de oro de la custodia catedralicia) está por hacer y es una de las tareas que debería haber hecho o debe hacer la Ley Estatal de Memoria Histórica. Pero que no ha hecho.
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