LA
LEYENDA NEGRA ESPAÑOLA
Su pervivencia manifiesta una elevada falta de cultura en amplias capas de la sociedad española. Carencia de la que se aprovechan los populismos e indpendentismos para arrimar el ascua a su sardina.
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La Leyenda
Negra Española ha tenido la virtud de difundirse con extraordinaria rapidez y
de perpetuarse a lo largo de los tiempos. Haciendo honor a nuestra idiosincrasia
española, tan cainita ella, recuerdo que la lección de historia que mejor
aprendían los niños españoles era precisamente ésta, en la que se nos ponía a
todos de vuelta y media. Este fin de semana del 12 de octubre lo he pasado con
una familia nativa de Perú, que desde luego conoce al dedillo la Leyenda Negra
y a la que en alguna ocasión he tratado de delimitar los acontecimientos que
por aquellas fechas sucedieron. Pero, cual no sería mi sorpresa que, nada más
despedir a mis invitados, aparecen las declaraciones estridentes y fuera de
lugar de sectores de la extrema izquierda, desde luego poco avisados, formados
e informados del asunto.
He pensado,
tras escucharles, que quizás no debimos descubrir América y esperar a que ellos
(antisistema e independentistas) llegasen al poder para que este descubrimiento
se hiciera de la forma tan modélica como ellos nos tienen acostumbrados a hacer
las cosas. Pero bueno, se produjo el descubrimiento y se duplicó, al menos, la
superficie de la tierra conocida (¿Deberá pedir perdón Colón?). Una expedición
española logró dar la primera vuelta al Mundo. Los ingleses, más tarde, la dieron
en 80 días y nos tienen aburridos con el asunto, nosotros parece que tengamos,
también por esto, pedir perdón.
Lo primero
que les aclaré a mis invitados es que la conquista no era una empresa nacional,
sino por el contrario, era empresa de los Reyes Católicos (La Corona de Aragón no participa pues la familia Colón tenía en su blasón, visura de ignominia, ante los reyes de Aragón). Que fue para el año
1812, cuando se constituye la nación española. Luego durante el siglo XIX se
desarrollan las guerras de independencia en Iberoamérica. Tras su triunfo los
criollos son los que imponen la lengua española en sus respectivas naciones con
el fin de evitar el acceso al poder de los nativos analfabetos o desconocedores
de la lengua de la administración de las nuevas naciones. Los reyes españoles jamás
impusieron lengua alguna a nadie.
A las
primeras expediciones a América iban los barcos con tripulación, exclusivamente,
masculina. Los viajes eran inciertos peligrosos y la probabilidad de naufragio
era muy alta. También eran expediciones de descubrimiento y de enfrentamiento
con los nativos. Por esa razón las mujeres no fueron expedicionarias, era tarea
(en la época) de hombres y de hombres curtidos. De esta manera los españoles
buscaron en aquellas tierras, mujer entre las nativas y se produjo el
mestizaje. No fue una cuestión planificada, sino consecuente con las
circunstancias de la época. De esta manera, los españoles adquirieron en América
una enfermedad venérea conocida como la Sífilis, enfermedad que causó la muerte
ya a Felipe el Hermoso, marido de Juana (La Loca). Hoy vemos a los líderes de
las naciones iberoamericanas que llevan apellidos españoles: Morales, Chavez,
Maduro, etc. Simón Bolívar era de origen vasco, luego, no es de extrañar el
amparo que dio Chavez a los terroristas de ETA.
Cuando muere
el emperador Carlos I se produce una situación comprometida para España. El
emperador deja a Felipe II un regalo envenenado, se trata de los Países Bajos.
Una guerra que sólo podía sostener el rey de España gracias a los recursos que venían
de América. La necesidad apremiante de dinero creó serios problemas en la
corona. Felipe II tuvo que sofocar, en su corte, una conspiración en la que
andaba metido su hijo Carlos y que trataba de derrocarle para luego abandonar
la guerra de los Países Bajos. Antonio Pérez (secretario de Felipe II), le propone pactar la paz con los Paises Bajos. ¡Quizás hubiera sido un acierto! La verdad es
que las riquezas que venían de América pasaban a los prestamistas
inmediatamente sin que el pueblo español se beneficiara gran cosa de ello.
La urgente
necesidad de materia prima (oro y plata) y el desgaste que producían los piratas
ingleses hicieron que los trabajos de los nativos fueran cada vez mayores. El Padre Bartolomé de las Casas, gran protector de los indios ya dice en el año 1511: Para dároslo a conocer me he subido yo
aquí, que yo soy la voz de Cristo en el desierto de esta isla, y por tanto me
conviene que con atención, no cualquiera, sino con todo vuestro corazón y con
todos vuestros sentidos, la oigáis; la cual voz será la más nueva que nunca
oísteis, la más áspera y dura y más espantable y peligrosa que jamás pensasteis
oír [...] Todos estáis en pecado mortal y en él vivís y morís, por la crueldad
y tiranía que usáis con estas inocentes gentes. Decid, ¿con qué derecho y con
qué justicia tenéis en tan cruel y horrible servidumbre a estos indios? ¿Con
qué autoridad habéis hecho tan detestables guerras a estas gentes, que estaban
en sus tierras mansas y pacíficas, donde tan infinitas de ellas, con muertes y
estragos nunca oídos habéis consumido? ¿Cómo los tenéis tan oprimidos y
fatigados, sin darles de comer y curarlos en sus enfermedades, que de los
excesivos trabajos que les dais incurren y se os mueren, y por mejor decir los
matáis, por sacar y adquirir oro cada día? ¿Y qué cuidado tenéis de quien los
doctrine, y conozcan a su Dios y criador, y sean bautizados, oigan misa y
guarden las fiestas y los domingos? ¿Estos, no son hombres? ¿No tienen ánimas
racionales? ¿No sois obligados a amarlos como a vosotros mismos? ¿Esto no
entendéis, esto no sentís? ¿Cómo estáis en esta profundidad, de sueño tan
letárgico, dormidos? Tened por cierto que, en el estado en que estáis, no os
podéis más salvar, que los moros y turcos que carecen y no quieren la fe de
Jesucristo.
Por otro lado
hay que tener en cuenta lo que significó llevar la civilización de América. Para
entenderla hay que reflexionar sobre lo que supuso la romanización de la península
Ibérica. La civilización de la península supone en primer lugar la desaparición
de los sacrificios humanos a los dioses, luego viene todo los demás: la lengua, el
derecho de familia, las obras públicas, la arquitectura, el arte, etc etc.
De la misma
manera, la civilización de América, supone el acabar con el sacrificio de seres
humanos a los dioses y acabar, también, con el canibalismo. De todo ello hay
puntual y extensa información en las páginas de la historia. Por otro lado,
igual que hicieron los romanos en España, los españoles llevaron su modelo de Universidad, precisamente la de Salamanca y la implantaron en América. Como Colón
era terciario franciscano, América es cristianizada por esta orden, a la que
nadie podrá acusar de no ser beatífica. Para aquella época fue una suerte y,
luego, los Jesuitas con sus fundaciones trabajaron incesantemente por la
dignidad de los indios americanos. No es de extrañar, pues, que el actual papa,
siendo americano lleve el nombre de Francisco.
De
Villarquemado era natural Santiago Sebastián que tiene el mejor catálogo de la
arquitectura de iberoamericana hecha tras la conquista (su obra cumbre). Se construyeron
ciudades a imagen de las europeas, en las que aparecen iglesias, palacios,
centros administrativos, fortalezas… todo de singular belleza y admirado por las generaciones venideras.
Por todo
ello, cuando se juzga este periodo de la historia, conviene poner en la balanza
tanto lo positivo, como lo negativo. Pero más importante que todo eso es
analizarlo a la luz del momento histórico. Hacerlos bajo la perspectiva de la
doctrina marxista, inexistente en la época, puede resultar simplemente
desastroso.
Queda
comparar la colonización española con la que hicieron los ingleses en el norte.
Los primeros colonos ingleses llegan a América con sus mujeres y sus hijos y no
hay mestizaje. Arrasaron con los nativos, simplemente, matándolos o metiéndolos
en “RESERVAS”. Luego, su ambición se hizo con el patrimonio de una España ya en
franca decadencia. ¿Por qué los ingleses no tienen Leyenda Negra y nosotros sí?
Una pregunta (la de la Leyenda negra) que no debería hacerse, ni plantearse, si algunos de nuestros políticos y sobre
todo, los más radicalizados a la izquierda, hubieran sido los mejores alumnos de
la clase. Pero, desgraciadamente todavía, a pesar de tanto Internet y móvil, no
podemos pedirle peras al olmo, ni claridad de ideas a un ignorante.
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