SAN PEDRO Y SAN PABLO
La estimación más reciente de la
población del planeta Tierra alcanza los 7.900.000.000 (siete mil novecientos
millones de personas). La supervivencia de la raza humana parece garantizada a
pesar de las guerras, las pandemias y otras enfermedades y catástrofes. El
hombre domina la tierra aparentemente. Y, el éxito del hombre en este pequeño
planeta, se debe al modelo que eligieron nuestros antepasados para desarrollarse
en todos los campos de la actividad humana. En cuanto a la forma de reproducirnos
ha sido la HETEROSEXUALIDAD y la MONOGAMIA, los elementos fundamentales. El
peligro mayor estuvo en el INCESTO y la CONSANGUINIDAD. El modelo, con algunas variantes, está extendido por todo el planeta.
Representativo de este modelo de
sociedad, que tanto éxito ha tenido, en nuestra cultura Judeo-Cristiana es la
figura varonil de San Pedro como gran padre y patriarca. Con su posición sedente en la cátedra y sus atributos de autoridad representa nuestra norma y modelo. El camino
inequívoco hacia el desarrollo y progreso de la humanidad.
También hoy se celebra la fiesta de San
Pablo que para el Cristianismo ha tenido un papel relevante en tres aspectos a
saber: Primero, extender la doctrina de Cristo a los gentiles. Segundo, incorporar
al Cristianismo la filosofía aristotélica y, tercero, establecer que todo poder
procedía de Dios. Con estos tres instrumentos convirtió a la secta de los
nazoreos en una de las más grandes religiones de la humanidad.
Conviene a las nuevas generaciones no
distraerse, ni confundirse, con el ruido de los tambores.