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JUNTS PEL, SÍ
JUNTS PEL PERNIL
JUNTOS POR EL PERNIL
CHUNTOS POR O PERNIL
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CADA UNO, "ASUAIRE"
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EL DIVORCIO POLÍTICO
¡ Cuánta felicidad perdida por
culpa de un mal matrimonio! Era común entre nuestros ancestros concertar el
matrimonio de los hijos, por puro interés político o económico. No sólo entre
la realeza, la nobleza o los poderosos, también, entre el pueblo llano se
realizaban matrimonios de conveniencia en los que venía, a veces, incluida la
endogamia. A la futura reina doña Petronila de Aragón, hija del rey Ramiro II
el Monje, la casaron por conveniencia con el conde Ramón Berenguer IV. Todavía
estamos padeciendo las consecuencias. A Diego Martínez de Marcilla le aseguraba
su padre: búscate a otra que, esta novia, te traerá problemas. De igual manera
estamos lamentado, principios del siglo XXI, la equivocación. Por suerte, hoy día,
cada uno se echa sus cuentas. No es que se acierte más, sólo hay que mirar el número
de divorcios, pero por lo menos no tenemos los demás que pagar las
consecuencias. Si para lo de los Amantes de Teruel no hay remedio, para lo
de Cataluña, Sí: la solución está en el DIVORCIO POLÍTICO. ¡Qué cada uno se
quede con su parte de río (Ebro), y todos tan contentos!
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