EL INTERIOR DE LA
IGLESIA
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Tobed se encuentra situado y
protegido en el estrecho valle del río Grío por dos sierras, una, la de Algairén
al este y otra, la de Vicor, al oeste. En esta zona de la celtiberia, cuatro ríos
bajan paralelos a desembocar en el Jalón, se trata de los río: Jiloca,
Perejiles, Grío y Frasno. A Tobed vamos nosotros, desde Encinacorba,
atravesando la sierra de Algairén y luego, bajamos desde Codos por una carretera
paralela al río. También desde Cosuenda hay un camino asfaltado. Con todo ello,
el viajero, verá la dificultad de llegar aún hoy día a este lugar, un lugar
escondido y del que son muchos los aragoneses y comarcanos de Cariñena que no
conocen todavía.
El lugar, perteneciente a la
Orden Militar del Santo Sepulcro, ejerció por las razones antedichas un papel
religioso importante en una época de en que la amenaza de los “moros” se veía
cierta. También recibió la protección de reyes, obispos y maestres. Se trataba
de establecer aquí un templo donde ejercer y practicar el reforzamiento
religiosos (ideológico) frente al enemigo común. Por todo ello no es de extrañar
la estructura constructiva de iglesia-fortaleza y la dotación de abundante mobiliario
entre el que destacaban y destacan todavía: imágenes, relicarios, iconos,
tallas, lienzos, etc. Todo ello tendente a servir y alentar una retaguardia
bien fortalecida y cargada de razones para la lucha contra el infiel. Abundando
en este tema cabe repetir aquí el episodio relatado en 1526 en el que se narra como, la virgen de
Tobed y los dos ángeles que la custodia, lloraron y sudaron treinta y seis
horas en ese año. Fue un acto de repulsa contra la conversión fingida de los
moros de Aragón. Este vaso de sudor luego, en 1610, se evaporó como consecuencia
de la expulsión de los moriscos de toda España. Estos actos eran meros mecanismos
de defensa que hoy los vemos por ejemplo, en Francia, cuando todos los
franceses, sin excepción, cantan la marsellesa (reforzador ideológico) por razón
de los atentados terroristas de origen religiosos musulmán, también. Los
españoles carecemos de este reforzador ideológico
nacional al no tener nuestro himno letra y que se manifiesta, en la
vehemencia con la que los partidos de izquierda se oponen a cualquier intento
de dotarlo de letra, es decir, de significado.
El interior del templo es pues,
gótico, bellamente decorado en sus ventanales, con un singular
testero y con capillas hornacina abiertas en los muros que apenas dan para
contener un retablo y un altar. En la clave del último tramo del templo aparece
el escudo del Papa Luna. Por otra parte, muchas son las singularidades de este
bellísimo templo que conocen como nadie Gonzalo Borras Gualís y Juan José Latorre
Pérez. (Continuará)
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LA IGLESIA DE TOBED, PRIMERA PARTE
PINCHAD AQUÍ:
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LA VIRGEN DE TOBED, SEGUNDA PARTE
PINCHAD AQUÍ:
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