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miércoles, 28 de noviembre de 2018

Noviembre2018/Miscelánea. LOS PARTIDOS DE EXTREMA (DERECHA / IZQUIERDA)

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LA EXTREMA DERECHA Y LA EXTREMA IZQUIERDA
La Historia, a menos la de occidente, se divide en “Edades” en función de quién detenta el poder en cada periodo. Edad Antigua o de los grandes imperios. Edad Media, el poder lo detentan los señores feudales. La Edad Moderna es la de las monarquías absolutas y por fin la Edad Contemporánea en la que el poder lo detenta el pueblo. Aquí lo que interesa es el paso de la Edad Moderna a la Edad Contemporánea. Derribar la monarquía absoluta supuso un rearme ideológico de las burguesías emergentes en Europa y particularmente en Francia. Quién primero emite un principio ideológico sobre el particular es, Johann Wolfgang von Goethe Nacimiento, 28 de agosto de 1749 Ciudad Imperial Libre de Fráncfort.  Fallecimiento, 22 de marzo de 1832 (82 años) Weimar, Turingia, Reino de Prusia. Se trata de aplicar la catarsis griega al conjunto de la sociedad, tanto a los poderes absolutos como a aquellos grupos ligados y, a las masas de población que permanecen “aturdidas” y tutorizadas /sometidas. Así, la norma o principio que seguirá este movimiento llamado ROMANTICISMO  es el emitido por Goethe y que señala en esencia que: sobre las cenizas de la sociedad actual habrá que fundarse una nueva en la cual, la sociedad sera feliz.
Si el romanticismo en las artes y en las ciencias tuvo su periodo limitado, no así en la política, que se arrastró hasta el siglo XX y del que aún tenemos algunos rescoldos en forma  de repúblicas populares. Unas repúblicas que ejercen una dictadura (dictadura del proletariado) en nombre del pueblo al que tienen sometido.
El romanticismo aplicado a la política dio lugar a las REVOLUCIONES ROMÁNTICAS. La primera es la revolución Francesa que comienza en 1789. El 21 de enero de 1793 era guillotinado el rey de Francia Luis XVI en la Plaza de la Revolución.
Esta “pasión” revolucionaria prende en toda Europa acabando con un buen número de monarquías y, las que aún quedan, tienen la forma constitucional, siendo el rey un mero recuerdo de otra época y ostentado la representación simbólica del Estado contemporáneo.
Por otro lado, se van forjando en Europa dos movimientos que, bajo pretexto de representar al pueblo, lo someten a una violencia jamás vista en la época de las monarquías absolutas. El primero movimiento es el llamado Marxismo-Leninismo, continuado y endurecido con el Estalinismo y el Trotskismo. Este movimiento conocido popularmente como COMUNISMO triunfa, principalmente en Rusia y países satélites y en realidad es una versión empeorada (muy empeorada) del régimen de los ZARES. La eliminación física de todo aquel que mantenga discrepancias con el poder es brutal. El que no es ejecutado inmediatamente es enviado a Siberia, una trampa mortal de la que es imposible salir. Sin embargo, esta ideología sigue triunfando y mimetizándose en la sociedad contemporánea. Son herederos, actualmente, los populismos  (Podemos) y pervive una forma “suavizada” que en su día renunció al marxismo llamada Socialdemocracia (PSOE).
El segundo movimiento es el Fascismo que nace en Italia bajo el liderazgo de Benito Mussolini nacido un 29 de julio de 1883,  en Predappio, Italia y fallecido (ahorcado) un 28 de abril de 1945, Giulino, Azzano, Italia. Pero lo peor fue que esta ideología impregnó al vecino alemán Adolfo Hirler. Hitler es, pues, el prototipo de personaje desquiciado (como Stalin) que se propone crear desde la nada un nuevo y “feliz” Estado que al igual que le marxismo pretende dominar el mundo. Hitler aniquila de raíz (de raso) a judíos, gitanos, minusválidos y enemigos ideológicos, pretende crear una nueva raza, la raza ária, blanca y superior.
Alemania es el país en el que entran en colisión, de una manera más explícita, estas dos ideologías. Por esta razón en Alemania están prohibidos los partidos nazis y los partidos marxistas.
España es un caso paradójico porque aquí, en la Guerra Civil 36-39) en el primer lugar del mundo donde se pone freno al Comunismo al ser derrotado completamente, aunque se tuvo una segunda parte (testimonial) con la incursión de los maquis. Sin embargo, la ideología de extrema derecha siempre ha tenido poco arraigo en España. Cuando ha habido elecciones libres, son escasos los diputados conseguidos, representando una minoría insignificante. La Falange es el representante genuino de este movimiento de extrema derecha. Fuerza Nueva nació en 1976 y despareció en 1982. Fracasó porque el “franquismo” no es /no era un movimiento ideológico, Franco era monárquico y las dos fuerzas a controlar, la Falange y los requetés (carlistas), los fusionó en el Movimiento Nacional.
Tras la muerte de Franco en el año 1975 la extrema derecha languideció y, de igual manera, le ha sucedido a extrema izquierda aunque con una peculiaridad muy española, se trata de la extrema izquierda ligada al movimiento separatista vasco y catalán. A tal efecto, más de ochocientos (800) muertos /asesinados lo han sido por la extrema izquierda. El bipartidismo, si tuvo alguna virtud, fue la de amortiguar y envolver a los extremismos. Tras la última crisis económica y la llegada de los emigrantes sin control se ha activado estos movimientos de extrema derecha y extrema izquierda.
En España no está ilegalizada (salvo el caso de la ETA) ni la extrema izquierda ni la extrema derecha. Por su representación política y por en número de muertes en el periodo democrático, resulta más preocupante la acción de la extrema izquierda que la de la extrema derecha.
El enmascaramiento político
El alcalde de Zaragoza, de extrema izquierda, con flores a María
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