"El Comandante Aguado"
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INSTITUCIONES PROVINCIALES
DE LA DPT
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INCLUSA
Expósito.-Dicho
de un recién nacido: Abandonado
o expuesto, o confiado a un establecimiento
benéfico (RAE).
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MANICOMIO
Manicomio.- Hospital
para locos (RAE)
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MATERNIDAD
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FARMACIA
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OBRAS PÚBLICAS
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GRANJA AGROPECUARIA
(Carretera de Cuenca)
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VIVERO
(En Santa Eulalia)
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ASILO DE ANCIANOS, SAN JOSÉ
(Carretera de San Julián)
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MASÍA EL CHANTRE
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BOMBEROS
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DIARIO DE TERUEL
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INSTITUTO DE ESTUDIOS TUROLENSES
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EL MVSEO PROVINCIAL
(La Joya de la Corona)
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Etc.
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LOS TONTOS DE LA PAJA
(La Diputación Provincial)
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De muy niño supe lo que era un
manicomio, porque a mi pueblo legaba todos los años, tras la trilla, un camión
cargado de “locos” con unas tremendas horcas con las que cargaban, luego
pisaban y, finalmente, colmataban el vehículo. Marchaba luego el camión, entre risas, con los
“locos” tumbados sobre la paja en lo alto del camión. Les llamaba la gente los
“tontos de la paja” porque, verlos trabajar, era todo un divertimento. Más tarde
supe lo que era la Diputación Provincial porque de vez en cuando venía un
señor a cobrar la contribución. El pregonero del pueblo lo anunciaba: mañana se
cobrará la contribución RÚSTICA Y URBANA. Y, en fin, viviendo ya en Teruel,
desde las barbacanas y murallas de la Andaquilla se divisaban los enormes
edificios (DPT) de la carretera de Zaragoza donde se disponían a lo largo de la avenida
y daban diferentes servicios a los habitantes de la provincia .
Ahora que esta institución (DPT) está en
franca regresión y sobre la que han entrado a dentelladas el Gobierno de Aragón
y Las Comarcas para restarle competencias, convendría saber algo de su historia y de que en esa historia hubo días de brillo
y lustre. Pero, de todas las cosas buenas o malas que haya podido traer esta
institución (división administrativa) vertebradora de España, hay una, llamémosle inmaterial que ha arraigado profundamente. Es la idea o concepto de
PROVINCIA. Una idea más arraigada que la de COMARCA, REGIÓN o NACIÓN. Tal es
así que, al oír el nombre de Teruel o el de TERUEL EXISTE, todo el mundo se
pone en alerta y en disposición de cualquier acción solidaria con el resto de
la provincia. Se siente lo de la Térmica de Andorra, lo de Riodeva, etc., con
dolor propio, en todos los rincones de la provincia y aún fuera de ella (turolenses diseminados por toda España).
La Constitución de 1812 creó las
Diputaciones Provinciales. En su artículo 325 se establecía que en cada
provincia existiese una Diputación para promover el fomento de la educación y
de los distintos sectores económicos y sociales. La Diputación estaría presidida por el
jefe superior (Gobernador Civil o Subdelegado del Gobierno) y formada por el intendente y siete miembros elegidos.
La Constitución de 1812 a pesar de su
funcionamiento intermitente fue de gran impacto en la vida contemporánea de los
españoles en general y de los turolenses en particular. Así, tras la muerte de
Fernando VII y mediante el famoso
decreto de Javier de Burgos de 1833, se crean las PROVINCIAS. El órgano/institución que ha
de gobernarlas será LA DIPUTACIÓN PROVINCIAL. Al frente de cada provincia un
JEFE POLÍTICO o GOBERNADOR CIVIL que durante muchos años presidirá, también, la
Diputación Provincial.
Nada más nacer la provincia de Teruel
ya se plantean dos problemas que han tenido continuidad histórica. El primero
es la lejanía de la capital de una buena parte de la geografía provincia, situada, aquella, en un extremo del territorio.
Por tal razón, Alcañiz, plantea pronto, la creación de una provincia propia y la
desobediencia a la capital turolense.
La segunda cuestión atañe, y desde
luego derivada de la primera, a la VERTEBRACIÓN del territorio. De un
territorio muy amplio y con una geografía complicada. Desde Valderrobres a
Arcos de la Salinas sigue habiendo un mundo…
La falta de VERTEBRACIÓN de la
provincia es un lamento que sigue vivo hoy y que paradójicamente la alternativa
a la provincia, es decir, la Diputación General de Aragón no está sabiendo
darle solución. Entre tanto, el ciudadano turolense ha observado entre 1812 y
2018 como Madrid se olvidaba de ellos. Teruel, cada vez más arrinconada y
olvidada, salía permanentemente de las previsiones presupuestarias del ESTADO. Teruel, última capital de provincia española a la que llega el ferrocarril. Teruel, última provincia española en la que se construye un metro de autovía.
Si uno pasea por la avenida de
Zaragoza de la capital provincial verá los edificios que albergaron, en su día,
las instituciones creadas por la Diputación para atender las necesidades
básicas que demandaba la población. Unos en ruina y otros felizmente restaurados
como el psiquiátrico y hospital. Unos perdieron su uso como el orfanato (El Comandante
Aguado) y otros como el complejo agropecuario de las Granjas no llegó nunca a
culminarse. De todas maneras, este amplio espacio de la avenida de Zaragoza,
daba de sí para el cultivo de varias fincas y para la cría de animales domésticos.
Con ambas cosas, por ejemplo, se superó el periodo de la autarquía. Los “tontos
de la paja” eran internos del manicomio (hoy psiquiátrico) que desarrollaban
tareas agropecuarias en el centro.
La Diputación provincial, al menos
durante los últimos tiempos (franquismo), ha sido una institución un tanto
opaca y es ahora, quizá, el momento de abrirla y acercarla a la ciudadanía
provincial. Hoy, se quiere tanto a la Provincia,
como se ignora a la Diputación. En fin, más de 206 años de historia no pueden ser ignorados. Compete, a la Institución, darse a conocer.
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Maternidad
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Hospital
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Farmacia
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Psiquiatrico
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Complejo agropecuario de Las Granjas
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Viveros de Santa Eulalia
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Obras Públicas
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El Chantre
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Asilo de San José
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Museo de Teruel
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