¿TIENEN VIGENCIA LOS REFRANES?
Muchos de los refranes informan sobre
el ciclo agrícola, sus tareas, y sus momentos esenciales. Es importante
advertir que había que pasar todo un invierno, preservando parte de los
alimentos y dosificando su consumo. Para San Antón, que es el 17 de enero,
seguramente ya se había consumido la mitad de la paja y la mitad del grano ya
que estábamos a mitad del invierno climatológico. Y paja y grano constituían el “pienso”
esencial de las caballerías. Sin embargo, para abril, que ya empieza el buen
tiempo pero que es la época de floración y de plantar el huerto, empezaban a escasear
los alimentos. Y, a menos pan, más
hambre. Por esa razón se decía que en abril, cuando crece la aliaga, crecía el
hambre. Hoy día, no tenemos conciencia de ello, porque el abastecimiento de
alimentos está garantizado todo el año. Pero, no siempre ha sido así.
“Cuando la aliaga florece, el hambre crece.”
“Pa San Antón de chinero, a mitá palla, a mitá granero y o
puerco entero.”
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