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Empezaremos relatando nuestra
experiencia personal, es decir, aplicándonos el cuento. Español, clase media y jubilado.
Un día te anuncian que vas a ser abuelo. Pocas cosas hay en la vida que sean
tan gratificantes como alcanzar la categoría de yayo. Vas poco a poco. Se hacen
las primeras ecografías. Preguntas si todo
va normal. ¡Que sí!, no seas pesado (te dice la hija). Luego te anuncian
que será niña, casi con toda probabilidad. Dice la doctora que sí, pero que
esperemos un poco más para saberlo con total seguridad. Todos son parabienes.
Alguien señala… hoy día, da igual que sea niño que sea niña. La sociedad ha
avanzado mucho y hay un muy alto grado de igualdad entre hombres y mujeres. Uno
se intenta convencer de que eso es verdad. Y a poco que la vida te aguante un
poco más en este mundo, haces propósito de poner todos los medios a tu alcance,
para que esa igualdad sea efectiva y que la nietecica (mi nietecica) no sufra
discriminación de ningún sentido. Pero claro, de vez en cuando te llegan
noticias desalentadoras como esa de que 53 mujeres murieron en el año 2014
víctimas de la violencia de género. También duele la discriminación salarial
entre hombres y mujeres. Luego hay actitudes, gestos, conductas, descaradamente
machistas, también, entre los adolescentes. No están tan claras las cosas como
cuando hemos pretendido autoconvencernos. Pero, si a esta conclusión hemos llegado porque el
asunto nos afectaba directamente... si la toma de conciencia es por puro
interés personal, no hemos avanzado mucho y bien pudiera ser que nosotros
mismos hubiéramos tenido conductas machistas en el pasado. La erradicación del
machismo y la igualdad de género debe ser un tema asumido por toda la sociedad.
El espejo que nos muestra de donde venimos, está es este dedo manchado de
tinta. En esas mujeres que viven todavía en la Edad Media cubiertas de oprobio
y vergüenza. En el burca que cubre de ignominia, en el velo de clausura o en
las esclavas de Cristo. Preciso será dar grandes pasos y tomar serias decisiones.
La publicidad de la televisión me dice a mí, que el partido en el poder, por
fin, se ha tomado este asunto en serio. Vayamos, en la Sociedad Civil al menos,
a la igualdad entre sexos con paso firme y sin dilación. La Iglesia católica ha
hecho avances en relación a la religión musulmana, pero, todavía le queda un
buen trecho por caminar.
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Fotografía tomada de la portada de "Antena Misionera."
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