VIVIR DEL PAISAJE Y VIVIR EN EL PAISAJE
*
Es normal que haya discrepancias en el tema de las energías renovables en el Maestrazgo y, también, en cualquier punto de la geografía turolense. El que vive en el pueblo, el que vive en el paisaje, en la comarca, en definitiva, en la provincia de Teruel, ve con preocupación el descenso de la renta agraria, la lejanía de los servicios y el futuro incierto para unas tierras cada vez más despobladas. Por el contrario, el que vive del paisaje y el que visita la zona por turismo o curiosidad... quisiera tener un paisaje fosilizado. ¡Que nadie lo toque! Sin tener en cuenta que ese paisaje ha sido consecuencia del abandono histórico. No es la primera vez que se plantea en nuestra provincia esta cuestión... Domingo Gascón y Guimbao a finales del siglo XIX puso a la venta en su casa de Madrid los cotos mineros que previamente había “denunciado”. Es decir, Gascón y Guimbao sabía que, a falta de capital endógeno, el futuro desarrollo de la provincia pasaba por la llegada de capital foráneo. Es es exactamente lo mismo que está pasando ahora. Llegan grandes multinacionales a invertir en la provincia. Esto se ve, por parte de algunas fuerzas políticas como un peligro en ciernes. Saben como se las gastan. Pero, por otra parte esta la realidad cotidiana. Toda ayuda es bienvenida para el que cría una recua de “mecos” en régimen extensivo en un pueblo del Maestrazgo turolense. Y ahí están las espadas en alto. El tiempo dará o quitará la razón. Sabemos que la forma de producir energía cambia cada vez con más rapidez. Todo es posible que dentro de poco tiempo, amortizada la inversión, nos dejen la basura en lo alto de los cerros. Todo se verá.