Desde lo alto de la torre Lombardera puede verse con toda claridad el espacio urbano comprendido entre el torreón del Cubo y la torre Lombardera, por una parte, y la calle el Rincón y la ronda de Dámaso Torán, por la otra. Un área de la ciudad que sufre el abandono de los años y que, por su riqueza patrimonial, está dispuesta a aportar nuevos elementos al patrimonio artístico, al cultural, y nuevos beneficios al turismo de la ciudad.
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Torreón del Cubo, lienzo de muralla y calle del Rincón, cortada. Esta calle se piensa prolongar hasta la plaza de la Bombardera.
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Vista de los tejados de esta parte de la ciudad, con el Museo en el centro.
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Puerta que se está abriendo (durante la restauración) en el muro del lado del Evangelio en la iglesia de San Miguel.
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