En el cauce de un río se llama zona de policía a la constituida por una franja lateral de cien metros de anchura a cada lado, contados a partir de la línea que delimita el cauce, en las que se condiciona el uso del suelo y las actividades que en él se desarrollen.
La construcción de la estación del ferrocarril en la vega del Turia de Teruel fue, en su época un acto corrupto y caciquil. El conde de la Florida propietario de las huertas en las que se estableció la estación y la era de vías, las donó a la ciudad. ¿Esta donación fue un acto de generosidad...? Nada de eso. Ya lo denunció en su día Domingo Gascón en la Miscelánea Turolense. Se trataba de evitar la construcción de viaductos y con ello conseguir un beneficio económico que se repartieron los accionistas del ferrocarril Central de Aragón.
*