Van adelantándose los trabajos que está realizando el Ayuntamiento en la plazuela que hay delante de la iglesia. El nuevo espacio tendrá una rampa (con muy poca pendiente) que permitirá acceder desde el frontón del castillo hasta la iglesia, sin barreras arquitectónicas. El nuevo espacio se divide en dos parte, una encementada frente a la puerta de la iglesia y otra ajardinada. Se ha trasladado el monumento a Lagasca. Todo esto una vez rematado, ajardinado y con las correspondientes rejas, creo que quedará bien. Comentado el asunto con Carlos Lasierra me señala que al menos dos árboles, los centrales en la fotografía, deberían haberse eliminado, dejando la monumental iglesia a la vista. Pueden conservarse los árboles laterales que en nada impiden o estorban a la fachada del templo.
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