Una de la cosas buenas que trae el cambio climático es el aumento de la producción agrícola. Siempre que el clima a evolucionado hacia un "óptimo climático" como es el caso actual, ha habido aumento de la producción agrícola. Dice la FAO y la OCDE que en los próximos 15 años la producción agrícola será ligeramente superior a la demanda. Así pues, uno de los problemas actuales es el almacenamiento de los excedentes agrícolas. Actualmente, es patente en este sentido, el problema en el aceite y en el vino. Como consecuencia de esta mayor oferta se buscan fórmulas para encontrar nuevos mercados (¿China?) o para hacer más atractivo el producto. veamos el siguiente caso. Esta botella de vino lleva la "marca" en aragonés: ALDEYA en lugar de ALDEA en español. Pero se encabeza en Inglés: "Family Wines" es decir Vinos de Familia o familia de vinateros. Si la clase de uva que está de moda es la GARNACHA, pues hay que vender Garnacha... La Garnacha es un una cepa que produce mucha uva con mucho grado, sin embargo, es de paladar áspero. Se vendió siempre a granel para reforzar los vinos "flojos" pero, ahora, con el "refinado" puede beberse y venderse como monovarietal. La botella lleva el respaldo de la D.O Cariñena. Está embotellada en Alfajarín, por lo que incumple una de la normativas de las D.O. y pertenece a la finca Aylés de Mezalocha.
Quizás, hoy día, con una sociedad urbanita y desinformada, lo de menos sea el líquido del interior de la botella. Lo más importante es la imagen y poner las cosas en varios idiomas. Para saber si un vino es bueno hay que beberlo. Por el contrario, si miras la etiqueta, lo mismo te da un pasmo... ¡Qué te lo dará...!
*
***
**
*
**
*