Este magnífico monumento que lleva al viajero desde la huerta (estación de Adif) hasta la barbacana que da acceso a la ciudad por la puerta de Guadalaviar, nace como consecuencia de la vicisitudes acaecidas con la traída del ferrocarril a Teruel en el año 1901. En efecto, la estación y la era de vías se instalan en las huertas que el conde de la Florida "regala" a la ciudad. La estación se coloca en la vega para evitar la construcción de grandes viaductos que habían de llevar el ferrocarril hasta la misma ciudad (véanse los viaductos de Albentosa). Así pues, fruto de la corrupción, la estación queda separada de la ciudad y con un fuerte desnivel. Es, pues, necesario solucionar el asunto. Será 20 años más tarde cuando Torán remate esta singular escalera neomudejar. Y, más tardíamente, el problema de subir la escalinata se ha solucionado con un ascensor.
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