ATENTOS A LOS MENSAJES QUE NOS LLEGAN POR LA RED
Ni la escuela, ni el instituto, ni la universidad (en general) ha preparado al individuo para procesar la cantidad de información que nos llega a diario. Cantidad y diversidad que nace en el seno de una sociedad, plural, diversa y, crece en una mezcla o amasijo continuo, que a una persona sin criterio puede perturbar y desorientar. Los mensajes vienen envueltos en los más diversos formatos y, edulcorados, con las más espectaculares fotografías y dibujos. El viejo aforismo de distinguir la paja del grano, lo correcto o incorrecto y, si me apuran, lo constitucional o inconstitucional debe ser tarea continua, lo que llamamos, estar al tanto. Para una persona que va constantemente con el móvil encendido y recibiendo cientos de mensajes diarios, esta tarea de desbroce puede ser demoledora. Como un inquisidor medieval, tiene que calcular que mensajes son positivos y cuales debe desechar. Aquí coloco algunos de los últimos y diversos mensajes que he recibido... y son, solamente, una pequeña muestra de un totum revolutum diario.
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