José Torán Peláez (Teruel, 10 de octubre de 1916 - Madrid, 14 de diciembre de 1981)
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Su padre fue José Torán de la Rad ingeniero español nacido en Teruel.
Acabó sus estudios de ingeniería de caminos en 1911. Comenzó sus trabajos dos
años después en Badajoz, trasladándose al año siguiente a Teruel. Realizó
numerosas obras en esa ciudad, la Central Eléctrica de Albentosa sobre el río
Mijares, la Escalinata (1921) y el Viaducto (1929), la última junto a Fernando
Hué y el plan de abastecimiento de agua a la ciudad (1932), obra proyectada
años antes. Fue el promotor del periódico independiente “La Provincia” en 1921
y en 1928 fundó el periódico monárquico “La Mañana”. Fue asimismo alcalde de
Teruel, durante los años veinte.
El hijo, José Torán Peláez, estudió
Ingeniería de Caminos en Madrid (1943), y empezó a trabajar en la Compañía
Madrileña de Tranvías, en la que su primera obra fue el puente de tranvías
sobre la avenida de los Reyes Católicos en la Ciudad Universitaria de Madrid.
Al poco cambió hacia las obras
públicas y fundó la empresa «Coviles», con la que construyó las presas de los
embalses del Vado (Guadalajara), Guadalén (Jaén), Cenajo en el río Segura y el
túnel del Zadorra en Bilbao.
Participó en una gran parte de la
construcción de la base naval de Rota. Allí inventó el tetrápodo, para hacer
escolleras.1
En 1967 formó parte de la primera
Junta Directiva de la Sociedad Española de Mecánica de Rocas.
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BIOGRAFÍA DE LA RAE
José Torán Peláez
Biografía
Torán Peláez, José. Teruel, 10.VIII.1916 – Madrid, 15.XII.1981. Ingeniero de Caminos, constructor y proyectista de presas.
Nació en Teruel, hijo de un notable ingeniero
que fue alcalde de su ciudad. Cursó el bachillerato en el Instituto-Escuela, en
Madrid. Durante la guerra trabajó en la construcción del llamado ‘ferrocarril
de los cien días’. Ingeniero de Caminos en 1942, empezó trabajando primero como
contratista y construyó, entre otras, las presas de El Vado, en el río Jarama y
Cenajo, en el Segura. Especial importancia tuvo su intervención como
contratista de la base americana de Rota, en Cádiz.
Más tarde, pasó al campo de la
consultoría y desarrolló proyectos hidráulicos en España y otros países, solo o
asociado con distintos consultores. Entre las muchas presas en que intervino
pueden citarse, en España, las de Pinilla, Odiel, Los Toranes, Torre Abraham,
Yeguas y la que ahora lleva su nombre. Para el ministerio de Obras Públicas
realizó gran cantidad de planes generales y estudios, entre los que sobresalen
los relativos al acueducto Tajo-Segura. De su labor en el extranjero destaca la
realizada en Irak, entre 1967 y 1970. En un tiempo récord recreció la presa de
Razzaza, en el río Éufrates, que creó un embalse de 31.000 hectómetros cúbicos.
Fue el primer español invitado oficialmente por el gobierno chino, del que fue
consultor en 1973 y 1979.
Llegó a mantener hasta siete oficinas
abiertas en Madrid y en ellas, aparte de gran cantidad de ingenieros,
colaboraron escritores y artistas como Jaime del Valle-Inclán, Delgado
Benavente, Rafael Sánchez Ferlosio o Carmen Martín Gaite. Ésta escribió su
biografía del Conde de Guadalhorce, a requerimiento de José Torán, gran
admirador del político andaluz. En 1963, junto con cinco empresas de consulta,
impulsó la creación de Tecniberia, oficina para promoción de la técnica
española en el exterior. En el Colegio de Ingenieros de Caminos fundó y dirigió
el foro de debate “Aula Libre”, que a su muerte fue mantenido por Ángel del
Campo.
Fue secretario y presidente (1966-81)
del Comité Español de Grandes Presas, vicepresidente del Comité Internacional
(1965-68) y presidente de éste, en el periodo 1970-1973. El espíritu que impulsó
toda su actividad queda reflejado en las palabras pronunciadas en su toma de
posesión, en el Congreso de Montreal, en que afirmó que, si sólo fuera por el
salario recibido, el ingeniero de presas no afrontaría los peligros de la
profesión, ni las graves responsabilidades que adquiere al firmar los
proyectos. “Comprometemos nuestros esfuerzos – dijo - para ofrecer una vida
mejor al hombre que, dentro de la masa gregaria, tiene necesidad de agua para
beber y para mejorar sus cosechas, de energía para hacer funcionar sus
herramientas y de agua también para sus diversiones”. Pero el escrito que de
forma más extensa recoge sus ideas es “Desde el Mirador”, publicado en inglés y
francés y traducido, póstumamente al español.
Obras de ~: “Recrecimiento de presas existentes y métodos para la construcción de presas por etapas sucesivas”, en Revista de Obras Públicas (ROP) (1959), págs. 1-15 y 215-229; “Las grandes presas en España: síntesis 1964”, en ROP (abril 1964), págs. IX-XVI; “The downstream viewpoint on spillways safety & economics”, en IX International Congress on Large Dams, Estanbul, 1967, págs. 917-931; “El panorama de las grandes presas españolas en 1970”, en ROP (1970), págs. 369-375; con J. A. Herreras Espino, “Las grandes presas en el desarrollo de los recursos hidráulicos. La experiencia española”, en ROP (1977), págs. 259-266; “El ingeniero consultor y la empresa moderna”, en José Torán. Estela 1984, Madrid, Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, 1984, págs. 72-95; “Desde el Mirador”, en Á. del Campo, José Torán, un ingeniero insólito, Madrid, 1992, págs. 303-343.
Bibl.: Á. Perea, “Meditación sobre
José Torán”, en VV. AA., Conferencias 1983, Asociación de Ingenieros de
Caminos, 1983; José Torán. Estela 1984, s.l., Colegio de Ingenieros de Caminos,
Canales y Puertos, 1984; A. del Campo y Francés, José Torán, un ingeniero
insólito, Madrid, 1992; F. Sáenz Ridruejo, “Dam Engineers in Spain”, en VV.
AA., Dams in Spain, Madrid, Comité Español de Grandes Presas, 2006, págs.
413-428.
Fernando Sáenz Ridruejo
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