LA MILAGROSA
La invención de la primera lámpara
eléctrica incandescente fue obra de Heinrich Göbel el 27 de enero
de 1880. Aunque se le atribuye a Tomas Alva Edisón la
invención de la lámpara incandescente ésta, en realidad, solo fue perfeccionada
por él. A Teruel llega pues, la luz eléctrica, relativamente pronto ya que lo
hace en 1889, nueve años tras la patente de Göbel.
La luz eléctrica llega a Teruel, según
cuenta José Carrasquer Zamora, fruto de la sociedad formada por D.
Jaime Fernández y D. Vicente Eced, quienes, para instalar el generador
eléctrico alquilan a la familia Garzarán la fábrica de harinas conocida hoy como La
Milagrosa.
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La carretera de Villaspesa, la Cuesta de
los Gitanos, la fábrica de harinas La Milagrosa y la carretera de Cuenca piden
una intervención rápida de las distintas administraciones y particulares. Con
ello se lograría poner un poco de orden y cordura en esta área de la ciudad en
estado tercermundista.
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