Rechitos en las zonas de poda.
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RECUPERANDO UNOS ALMENDROS
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Decidimos recuperar una partida de
almendros que tenemos en un campo del pueblo. Son unos almendros que tienen
muchos años y un tronco muy leñoso. Para las navidades podamos y remoldamos,
dando con la poda y la supresión de ramas leñosas secas, una forma adecuada,
generalmente forma de copa. La segunda tarea fue labrarlos de primavera (dos
pasadas), tras las lluvias de abril, pues el suelo era ya bosque con muchos
espinos, aliagas, zarzas y otros arbustos. En tercer lugar, ya entrado el mes
de mayo y provistos de unos guantes duros, limpiamos los brotes que rechitaban
en las zonas de poda.
En la fotografía mostramos la
situación actual del campo de almendros. Todavía nos quedan tareas pendientes
para poner en buen estado a los árboles. La dos siguientes serán el
sulfatado, abonado y la eliminación de las malas hierbas de la zona de sombra
de los árboles.
Este año no hemos mejorado en la
cantidad de almendras que prevemos recoger, pero sí que se nota ya el aumento
en la calidad de las mismas. La última fotografía muestra el tamaño que ya
tienen las almendras.
El tronco ha quedado limpio de brotes
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La siguiente tarea es sulfatar, abonar, quitar las malas hierbas y las plantas arbustiferas que han crecido junto al tronco del almendro. Para junio, si llueve, darles otra labrada.
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El fruto está garantizado para este año.
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