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miércoles, 12 de junio de 2019

Junio2019/Miscelánea. EL VÉRTIGO DE LOS EXTREMOS EN LA POLÍTICA ESPAÑOLA


VOX
(Los apestados de la política española)
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En el espectro político (derecha-izquierda) de cualquier país existe o puede existir la extrema derecha y la extrema izquierda. En España, la última crisis económica dio en romper el bipartidismo que venía funcionando desde Cánovas del Castillo (con alguna discontinuidad) y crear un nuevo modelo, el pluripartidismo. Se dijo que el “pluri” era mejor y se trataba de dialogar y llegar a acuerdos: esencia misma de la democracia.
España tiene dada, por esta nueva realidad, dos extremas o extremos: extrema derecha y extrema izquierda. Pero, veamos… En la extrema izquierda situaríamos a partidos comunistas que tienen como objetivo la “dictadura” del proletariado: (leninistas, estalinistas, trosquistas, anarquistas y populistas) y además, aquellos que alientan la violencia y tienen o han tenido que ver con ella (terrorismo etarra).
Por la otra parte la extrema derecha tiene que ver con el fascismo: Son partidos fascistas los que han seguido el modelo italiano de Mussolini o, el todavía más radical, nazismo hitleriano.  Como en España hemos tenido una reciente (o no tan reciente) dictadura en el tiempo histórico del fascismo, se ha dado en llamar al franquismo, erróneamente, régimen fascista. Era fascista, la Falange, en exclusiva, pero no el carlismo (el Requeté) con el que Franco los unió (nunca fusionó) para formar el Movimiento Nacional.
En esta tesitura cabe preguntarse porque Ciudadanos no habla con Vox, le marca una línea roja y, sin embargo, acepta sus votos??? Si ciudadanos piensa que Vox es un partido fascista, estaríamos de acuerdo en la línea roja y en que no admitiera sus votos. Pero, a la inversa, desde el momento en que admite su votos desactiva la primera premisa y si no, TREMENDA CONTRADICCIÓN.
En estos momentos tenemos un partido de extrema izquierda llamado EH Bildu, heredero (muy reciente) de ETA, una banda asesina y cuyas muertes todavía están vivas en la mente de los españoles. Nadie se espanta o parece espantarse de que, el PSOE, acepte sus votos y de que brinde con ellos en Navidad. Y, aquí, sí que hay una línea roja. La línea roja debe de estar señalada con aquellos que han utilizado la violencia, que no han entregado las armas y no han pedido perdón al pueblo español.
Extrema derecha o extrema izquierda, lo españoles deberíamos ser lo suficientemente sensatos para no votarlos pero, en cualquier caso, lo suficientemente capaces para saber el peligro que entraña uno y otro.
Hitler como Stalin, Stalin como Hitler, se situaron en el vértice de la pirámide del poder y decidieron sobre el destino y la aniquilación sistemática de pueblos enteros. Acercarse a este vértigo por cada uno de los extremos del espectro político es, hoy día, un suicidio intelectual.

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