Plaza de España en Paniza.
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No gusta a los paniceros el mobiliario que se ha colocado en esta plaza de España. Entre otras razones porque choca el color y el volumen de los maceteros con el entorno y porque los bancos se hacen insufribles para los abuelos que aquí vienen a tomar el sol. Algunos se atreven a decir que para esta plaza estaban destinados los que se han dispuesto en la Plaza de España de Cariñena. Desde luego hay una coincidencia y es que, el suelo de esta plaza, absorbería mejor el óxido férrico que desprenden los de Cariñena con el riego.
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Plaza de España, fachada de la iglesia. Esta plaza se originó como consecuencia de las medidas higiénico sanitarias promulgadas en el siglo XIX y que, entre otras cosas, obligaba a sacar los cementerios de las poblaciones. Este lugar, antes de ser plaza fue, durante mucho tiempo, el "fosal".
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Palacio renacentista en la plaza de España de Paniza. En este monumental edificio se encuentra la Biblioteca de María Moliner y las oficinas de Ibercaja.
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CASAS SEÑORIALES
Paniza posee un abundante número de casas renacentistas con gran fachada en ladrillo y el típico remate en arco corrido. Cerrando la plaza por el lado de la calle Mayor se encuentra una de ellas que luce en su fachada dos escudos, el uno es de los Bernabé.
Es abundante en toda la
comarca el apellidó Bernabé que nace en la Guerra de los dos Pedros y,
concretamente, en sitio de Báguena. De tan famoso suceso devino el privilegio de nobleza que
alcanzó (caso excepcional) también a las hijas. Por tal razón, las familias
ricas de Aragón las pretendía pues, al casarse con ellas, quedaban libres de
impuestos de ahí que se señale en el poema de Gracia Dei que: “son sus fembras compradas”. Privilegio que
luego, tuvo que revocarse al extenderse en demasía el número de personas
exentas de pagar impuestos.
“…porque fue su nombradía
más que las más estimadas,
y lo es hoy su fidalguía,
pues son sus fembras compradas.”
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Veleta de la torre cristiana de Paniza.
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Blasón de los Cebrián en una casa próxima a la plaza.
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En campo de gules, un ciprés de su color y dos leones de oro empinados a su tronco; bordura plena de plata.
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