Esta ferretería de la imagen, llamada "Catalán" y sita en la plaza de la Judería de Teruel es un establecimiento singular. Sus propietarios, en trance de jubilación, manejan un catálogo de más de 5.500 (cinco mil quinientos) artículos en su memoria. No hay ordenador, ni catálogo, ni nada por el estilo, todo lo lleva el matrimonio "en la cabeza". Han desarrollado una memoria prodigiosa. Pide lo que quieras y te lo sacaran de aquí o de acullá en un instante. Me lo estoy pensando y para conservar la memoria voy a comprarme una ferretería. Aunque ellos hacen mal en jubilarse, a mi modo de ver, pues van a perder esa capacidad de evocación que tienen al no ejercitar la memoria.
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